PRAGA

Ello se guarda, se prende para los dos. La memoria de los países se almacena en envoltorios Bagaje necesarios y próximos. Ello se acumula en el menor. Desafiará la autoridad su fuerza y brabuconería. La Madre le permite el consumo de fantasmas dedicado y la brutalidad de los llantos más antojadizos e imprudentes. Ello no daña. Existe la posibilidad que le queramos. En medio de la confusión la familia se transforma en una empresa pública.

El Padre desintegra su masculinidad cuando la impone. La madre vive feliz bajo la premisa de que su vagina gobierna al padre. Esto es del todo cierto.

La Abuela retorna a la niñez para poder jugar con sus nietos. El Abuelo (a quien aún se le para) encuentra en el trabajo su vigencia. La muerte camina al costado de ambos. Es un latido en la habitación que acabamos de cerrar. Es Ahí. Debe entrarse por entero. La Abuela llama a su nieto y al hacerlo esta llamando a su hijo muerto. Lo hace entrar a su recámara. En el centro del piso hay un reflejo naranja. El Dominio De Las Habitaciones. Este Es Mi Nieto Menor. El Hijo. El Retorno del Hijo Muerto También Llama Al Mayor. Vienen Ambos.

Comprendemos al Padre y su enorme tristeza porque ama Los Caballos, Las Carreras, Las Cosas Simples. Percibe el exterior como una amenaza. Los Exc.ll.mos e ILL.mos. amigos son anchos bosques de lodo con la perpetuidad de Ya Mismo. No verá defectos en sus hijos varones hasta que estos se lo digan, y serán la negación del tiempo ya sospechada. Ello salió de la panza materna y se plantó en la tierra. Ahora recorre sentidos prefigurados. La familia es un sueño de varones.